LO QUE PUDO HABER SIDO Y NO FUE

Cuentan que por estas tierras, hace muchísimo tiempo, las cosas no eran como ahora. Entonces se podía salir a la calle sin ningún temor, se gozaba de tranquilidad, la gente se conocía en la calle y se saludaba, los niños podían ir a escuelas dignas, los parados cobraban el paro, no había armas por las calles, ni ajustes de cuentas a diario, y los que querían podían tener su trozo de tierra para pasar los fines de semana, o para lo que fuera. Dicen que unos gobernantes cegados por la ambición de poder fueron los que lo comenzaron todo, ayudaron a los mafiosos a que se instalaran en estas tierras y poco a poco fueron echando a muchos de sus habitantes a la fuerza. También comentan que los habitantes de aquel entonces quisieron ganar dinero rápido y no pensaron en el futuro, ni en sus descendientes y se dejaron convencer creyéndose todo lo que les contaron, deslumbrados por fuegos de artificio.

Pero también cuentan que alguna gente se opuso y protestó. Algunos habitantes de la Comarca suplicaron a las autoridades claridad en el proceso, informes y mucho debate. Exigieron a los gobernantes que antes de apoyar un proyecto de tal envergadura se informaran y valoraran pros y contras. Pero, desgraciadamente, no les hicieron caso y triunfó el despropósito. Una vez más la ambición ganó a la razón y ahora todos sufrimos las consecuencias.

Esto que os acabo de contar, puede quedarse sólo en un cuento o puede convertirse en realidad dentro de muy poco. La Stafa tiene muchas caras, desenmascararla depende de todos. Como madre, os pido que antes de opinar, os informéis. ¡Por el futuro de vuestros hijos!

Una madre